De nuevo vengo con una pseudo-reseña, en esta ocasión de un par de novelas de fantasía: La Corte de los Espejos, y su secuela La Última Primavera.
Estamos en TerraLinde, el hogar de las hadas y otras criaturas fantásticas. Tras una cruenta guerra la Corte de los Espejos, hogar de la Reina Silvania, está en paz. Aunque no por mucho tiempo...
Para los jugadores habituales de Changeling: el Ensueño, es posible que estos dos renglones hayan dado una pista de por dónde van los tiros de la novela. En un lugar plagado de Sidhes, Pookas, Redcaps y otros seres legendarios del mundo férico nos encontramos con una grandísima trama de conspiraciones, traiciones, lealtad, principios...
Es difícil, para mi, reseñar un libro sin destriparlo, así que hablaré más bien de las sensaciones que me produjo y los puntos fuertes que le vi.
La Corte de los Espejos es una novela adulta. No por contener violencia y escenas de sexo (que lo tiene, aunque estas últimas son totalmente blancas), sino por la profundidad que tienen los personajes al desarrollar sus sentimientos. No es solo que sean personajes grises, con blancos y negros como todo ser humano, sino que llegan a traicionar su propio comportamiento cuando las cosas se les van de las manos.
El libro no hace reparos para tratar ningún tema y en algo que parece tan sencillo como una intriga política, encontramos un trasfondo y una realidad presente y pasada que conforman decenas de ramas en un árbol centenario.
Es simplemente imposible no enamorarse de alguna forma u otra de muchos de los personajes de La Corte y, aun así, no odiarlos más de una vez.
La guerra nunca terminó, esto solo era una tregua...
Y llegó la segunda novela. Más información sobre el pasado de los protagonistas, nuevos personajes en la ya extendida trama, el retorno de otros, misterios que quedan resueltos para sorpresa de muchos...
Lo mejor es que hay hilos que se quedan sin resolver, y creo que no resolverlos nunca puede ser un gran acierto. El mundo de las hadas está lleno de secretos, y si no que le pregunten a Dama Mirlo. La Última Primavera no es más que la magistral culminación de esta historia. Si probáis la primera, y os gusta, la segunda es obligatoria.
¿Y qué viene después?
A mí el final de La Última Primavera me pareció perfecto. Sin más que añadir, sin más que tejer en esa telaraña de vidas. Pero este mundo no acaba aquí. La autora está trabajando, junto a otras personas, en un juego de rol con su propio sistema: TerraLinde. Yo tengo un ojo encima y espero poder traer algo de información al blog en el futuro.
Como petición personal, me encantaría leer algo sobre la Guerra de la Reina Durmiente. ¡Un libro del pasado ya, por favor!
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